Se coloca una sandía (preferentemente sin semillas) de costado y se evalúa qué extremo sería la mejor base para colocarlo de forma vertical. Con una cuchilla de cocinero, se corta una pequeña parte del extremo redondeado para crear una superficie plana, con cuidado de no cortar la pulpa. Se corta el extremo opuesto para crear una “tapa” y se coloca la sandía en posición vertical. Con una cuchara grande o un cucharón para helado, se vacía la sandía y se reserva la pulpa y el jugo. Se coloca la pulpa en una licuadora y se procesa el tiempo necesario para licuar la mezcla. Se pasa por un colador de malla fina para eliminar los restos de pulpa. Se combinan Patrón Silver, jugo de sandía, jugo de lima, jarabe simple y sal, y se revuelve bien. Se vuelve a colocar el contenido en la sandía para servir y se agrega hielo para enfriar. Se utiliza un “grifo para sandía”, si se cuenta con tal dispositivo, o se utiliza la sandía como cuenco y se sirve el ponche con un cucharón. Como alternativa, en lugar de usar la sandía como jarra, se utiliza un cuenco para ponche a elección.